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domingo, 15 de noviembre de 2020

El holón España y el estadio Mítico-racional ámbar/naranja

He leído en «La Religión del Futuro» de Ken Wilber por primera vez una descripción de lo que él llama estadio Mítico-racional ámbar/naranja, es decir, que lo considera un estadio por si mismo. Esto me ayuda a aclarar una de las discusiones más recurrentes que he tenido con el tema del soberanismo. Mi tesis ha sido que el centro de gravedad del unionismo era mítico-pertenencia Ámbar. Esto es: la unidad de España es un bien religioso absoluto, y quien se atreva cuestionarlo sólo puede ser un perverso egoísta. De ahí hemos visto como la intelligentsia española ha construido la imagen del «nacionalista catalán» con los elementos clásicos del anti-semitismo: endogamia, deslealtad a la patria común, preocupación exclusiva por el dinero, etc. La típica construcción del enemigo interno que cohesione a los fieles (¡«yo no soy nacionalista, soy español!»), el último recurso de la corrompida elite que dirige el Estado surgido del Régimen del 78, cuya podredumbre ya no sabe como disimular. Así, al disidente se le aplica el derecho penal del enemigo y no se le combate con la acción política Naranja, sino desde las cloacas, con los servicios secretos y la lawfare de la alta magistratura. Estas semanas, por cierto, parece que Podemos acaba de descubrir que esta práctica no-política del Deep-State también se les está aplicando a ellos (mientras solamente se aplicó al soberanismo, Podemos se puso de perfil).
Cuando yo defensaba esa tesis del unionismo como Ámbar recibía la réplica indignada de cómo podía defender algo tan regresivo como el “nacionalismo”, compuesto de victimismo (algo cierto: su sombra Verde, de la que ya he hablado en este blog) y etnocentrismo (en mi opinión: proyección del “mapa oculto” ámbar de los partidarios de la unidad de España). Su tesis era que España es una “democracia consolidada”, es decir, plenamente naranja. Por supuesto que son innegables los elementos democráticos naranja de la Constitución del 78 (C78), además de todo lo verde que se ha incorporado desde entonces, como los derechos de los homosexuales. Aunque el anhelo infantil de repetir “somos una democracia consolidada” (nadie en Europa necesita proclamar eso) debería alertar sobre qué sombra está actuando ahí.
Esta consideración de lo ámbar/naranja com un estadio por si mismo me hace entender mejor la dinámica. Según Wilber, en ese estadio surgen los “expertos” que aplican la capacidad racional a un “enfoque global que sigue siendo muy rígido, inflexible y concreto”… “centrará su visión concreta de un problema sin hacer el menor intento de incluir otros enfoques o métodos. Y cuando mencionan otros enfoques, suele ser para describir porque no son exactos, eficaces o eficientes como el suyo y se centran en características que representan el aspecto mítico-etnocéntrico [la unidad de España], es decir en la visión que se tiene desde el interior del grupo”. 
Han habido muchos expertos juristas que han dicho que la demanda soberanista cabía en una constitución Naranja. Están otros ejemplos naranja como Quebec y Escocia en que así fue. Sin embargo la respuesta de los expertos del Estado al servició del R78 ha sido inflexible: “España no se va a romper” y derecho penal del enemigo para los disidentes. Más allá de las proclamas de “Viva el Rey!” por los próceres del CGPJ, sus admoniciones a los jueces para recordar el fin último de la acción de la justicia es la unidad de España según la C78 (no la defensa de los derechos fundamentales, por ejemplo), o las filigranas conceptuales con las que argumentan ante la justicia europea que les entregue al presidente exiliado de Catalunya para poderlo encarcelar, me hacen pensar que este estadio Mítico-racional de Wilber pone claridad en el tema. 
Por un lado está la auto-percepción naranja de la intelligentsia de España como una democracia moderna europea etc que gracias a la Transición dejó atrás para siempre el fascismo representado por Franco. Por otro lado tenemos una práctica muy alejada de política liberal naranja puesto que se basa en el lawfare y el derecho penal del enemigo, para el que la división no está entre ciudadanos inocentes o culpables, sino entre “personas” y enemigos contra los que el Estado debe actuar preventivamente. Este nuevo estadio Mítico-racional ámbar/naranja puede que sea la explicación para esa incoherencia entre lo que se practica y lo que se percibe por parte de los que mantienen el R78 de España.

lunes, 18 de agosto de 2014

Unionismo naranja británico versus unionismo azul español

Un manifiesto de celebrities británicas en favor de mantener la unión con Escocia, Let’s stay together, parece que ha suscitado euforia entre la prensa unionista española. En este blog no nos interesa tanto analizar per se las posiciones ideológicas del soberanismo o del unionismo como aplicar el modelo integral para ver en qué altura de la Espiral se encuentran las diferentes manifestaciones de esas posiciones ideológicas
Desde el punto de vista Integral pues, encuentro una gran diferencia entre lo que expresa este unionismo británico y ciertas manifestaciones del unionismo español, por mucho que la conclusión de los británicos “lo que nos une es más grande que lo que nos separa” sea la misma que suscribirtía un unionista de cualquier parte. El otro día publiqué que el conocido manifiesto unionista “Libres e iguales” me parecía plenamente Azul/Ámbar, esto es, el nivel llamado mítico-pertenencia donde las certidumbres son sólidas y el Bien –lo nuestro- se diferencia tan claramente del Mal –los otros- que no caben componendas entre ambos, solamente el acatamiento al Bien oficial y el combate al Mal exterior.
A diferencia de ese unionismo español, el manifiesto británico mantiene un exquisito respeto a la decisión que tomen los escoceses, decisión expresada en una votación democrática. Esto se inscribe en la altura Naranja (liberal, racional) e incluso evolucionando a Verde (pluralista-sensible). En el nivel Naranja ya nos encontramos con el respeto a los derechos individuales (como decía Voltaire “destesto lo que Vd. dice pero defenderé hasta la muerte su derecho a decirlo”) que históricamente nació en el sXVIII con la Ilustración y las revoluciones francesa y americana. Es el nivel que ha traído la revolución industrial, la era científica y la democracia. Desde el último tercio del sXX ha emergido el nivel Verde, que ha criticado al Naranja por la amenaza al medio ambiente y también por las insuficiencias de la ciencia positivista y de la democracia liberal para una auténtica emancipación humana.
El profesor Carles Boix, de Princeton, ha comparado en unos tweets la diferencia entre ambos manifiestos. Recojo estos tweets porque ilustran la diferencia entre la altura Azul/Ámbar y la Naranja de unos y otros

NARANJA: “Let’s stay together”
AZUL/ÁMBAR: “Libres e iguales”
Queremos haceros saber hasta que punto valoramos los lazos de ciudadanía con vosotros
El separatismo catalán quiere romper la coexistencia entre españoles y destruir su estátus de ciudadanos libres e iguales
El separatismo catalán está hermanado con el populismo anti-europeo y promueve la derrota de la democracia española
Queremos... expresar nuestra esperanza que votareis para renovar [nuestros vínculos de ciudadanía]
Rechazamos cualquier negociación que, con el pretexto de evitar el conflicto que plantea el secesionismo catalán, limite la soberanía del conjunto de los ciudadanos [prohibido votar el 9-N]
La decisión de si abandonais nuestro país compartido es, por supuesto, absolutamente vuestra
Reclamamos al Estado que aplique toda la ley y advierta con claridad de las consecuencias de violarla. Ningún infracción debe quedar impune y ninguna sentencia puede ser desacatada

Lo que caracteriza los niveles de la Espiral es que cuanto más arriba más inclusivo, y cuanto más abajo más estrecho. El interés de una política integral no está tanto en las posiciones ideológicas concretas (izquierda/derecha, soberanismo/unionismo...) sinó hasta que punto puede incluir y trascender otras visiones igualmente válidas pero más estrechas. Es por eso que, aunque ambos se llamen unionismo, ambos son fundamentalmente diferentes. Hay más afinidad entre un unionismo azul y un soberanismo azul (los dos se necesitan para proyectar en el otro su sombra) que entre un unionismo azul y otro naranja, como es el caso que ahora tratamos.

lunes, 21 de julio de 2014

(2ª Parte)¿Qué es más evolutivo, el soberanismo o el unionismo?

Hay otro factor que me hace pensar que el soberanismo es más evolutivo que el unionismo. El nuevo partido “Podemos” ha puesto de moda la expresión “la casta”. Pero no son los únicos; En el diario EL PAÍS había leído hace tiempo artículos de académicos hablando de las “elites extractivas”. (No sé si ahora, espantados como están en EL PAÍS por el ascenso de Podemos y la basura que les echan encima, van a continuar en esa línea de hablar de las elites extractivas –al fin y al cabo ese diario también vive de ellas). En otros lugares se explica mejor que aquí en que consiste esto de “los empresarios del BOE” “los del palco del Bernabeu” y mucha de esa gente que se sienta en los consejos de administración de las empresas del IBEX 35. Tampoco voy extenderme (ya se explica mejor en otros sitios) como esta elite altera las reglas del libre mercado con su clientelismo y corrupción, han saqueado y no han asumido ninguna responsabilidad por el desastre economómico que ahora el pueblo está pagando en forma de recortes, paro y demás. Esto de asumir responsabilidad y rendir cuentas es algo que sólo se consolida con el vMeme Naranja (tecnoracional, capitalista, logro), a lo Azul/Ámbar (mítico-pertenencia)le resulta ajeno puesto que el poder es más bien heredado, los lugares ya están asignados y por tanto no se percibe que sea tan necesario dar justificaciones de cómo se ha ejerecido ese poder.
Todo esto viene a cuento porque se ha acusado al nacionalismo, con bastante acierto en mi opinión,  de que diluye los conflictos de clase haciendo creer que los de arriba y los de abajo comparten un interés común –la nación- frente al enemigo externo y, peor aún, el enemigo interno al que hay que afrontar unidos. Un buen ejemplo de esa estrategia nacionalista –echó por tierra las predicciones de Marx de que el proletariado no tiene patria: “proletarios del mundo ¡unios!”-  fue la I Guerra Mundial, de la que ahora se habla bastante por su centenario. Otro buen ejemplo fue el fascismo. “Ni derechas ni izquierdas: Españoles”, que decía el General Franco.
La casta extractiva, muchos de los cuales está estudiado que son descendientes directos de ministros y jerarcas del régimen de Franco, está muy anclada en lo Ámbar/azul, lo identitario (“Ejpaña!”) –de ahí también su cercanía con el fútbol. Hasta ahora han usado con bastante éxito esa estragia nacionalista, heredera directa del franquismo. Está por ver si estamos asistiendo al final del régimen bipartidista PPSOE como dicen algunos. Lo que sí que han demostrado es su incompetencia para liderar la economia –su falta de desarrollo de lo Naranja (racional, logro)- así como su incompetencia para manejar e integrar (no digamos ya trascender) la diversidad que bulle bajo lo que ellos llaman España.
Si el proceso soberanista acaba bien –bien para los soberanistas, me refiero- representará un shock brutal para esa conciencia Azul/Ámbar, dominante no sólo en las elites sinó también en gran parte de la población española. En mi opinión será un shock del estilo de lo que sucedió  en 1898. Sin embargo este shock trajo el Regeneracionismo y uno de los mejores movimientos culturales de la historia de España, la Generación del 98.
Es por eso que pienso que el proceso soberanista también puede ayudar a que el centro de gravedad español evolucione hacia una estructura de conciencia más inclusiva (por mucha fantasía de “independencia” que tengan muchos soberanistas, Catalunya no se va a “ir” muy lejos –en Europa nos encontramos todos- y los lazos históricos y culturales ahí están), y también más responsable y más proclive a la rendición de cuentas.
Por supuesto esta tensión y ese shock puede ser demasiado para la conciencia Azul/Ámbar unionista, y activar regresivamente mecanismos Rojos (poder, domino) que se usaron en otras épocas: “Hay que bombardear Barcelona cada 50 años”. No hay más que ver otras partes del mundo, la primavera árabe en Egipto por ejemplo: movimientos evolutivos de vanguardia que usaban las herramientas postmodernas han acabado activando las regresiones Azul/Ámbar e incluso Rojas de los Hermanos Musulmanes primero y después de los militares. Sin embargo no creo que sea así en España. La pertenencia a la UE y el nivel educativo de la población creo que impide el clásico recurso al ejército y la fuerza que en otras épocas empleó la conciencia Azul  en aras de “la unidad de España”.

sábado, 19 de julio de 2014

¿Qué es más evolutivo, el soberanismo o el unionismo?

En el grupo de Facebook se discutió esta cuestión. Mi posición es que el unionismo, dominado por el PP y su estructura Azul/ámbar, en estos momentos es muy regresivo. Creo que el soberanismo está más cerca de la conciencia de 2º grado, esmeralda, y por tanto, empuja  mejor la evolución de la conciencia.
A lo cual, Alejandro Villar replicó
Me pregunto si apoyar el soberanismo o el "unionismo" tiene alguna influencia en el desarrollo a través de los estadios. Supongo que no. Lo que sí podría ayudar es meterse menos de la postura que no apoyamos y con la que no estamos identificados, para ampliar nuestra perspectiva...
Enric Carbó, ¿por qué crees que tiene alguna influencia el apoyar el soberanismo o el "unionismo" sobre el desarrollo a través de los estadios?¿hay algún estudio que lo demuestre?. Me sorprendería que adoptar determinada ideología tuviera algún efecto en el desarrollo a través de los estadios, sería un cambio meramente translativo. Y otra cosa es que gente con determinada visión del mundo sean más proclives a adoptar o apoyar determinada postura...
Mi respuesta es que no lo digo tanto por la ideología concreta del soberanismo "per se", sinó por cómo está planteada ahora la controversia política entre apoyar el soberanismo o apoyar el unionismo. Pienso que en el planteamiento soberanista el "centro de gravedad" está más cerca del segundo grado, ya que el unionista lo encuentro en un Ámbar muy insano y por tanto regresivo; está a la defensiva, sin ofrecer propuestas en positivo, sólo amenazas. (En otro post trataré de hablar de esa “sombra”)
Con esto de “empujar el centro de gravedad hacia arriba” me baso en un ejemplo que suele poner Ken Wilber: En la Constitución americana del s. XVIII, Jefferson y sus redactores apoyaron una visión Naranja de la misma frente a la visión Ámbar, dominante y mayoritaria en esa época.

Cuando se llega al segundo grado,Amarillo/ Esmeralda, la controversia “unión uniformizadora” versus “independencia” se diluye, puesto que ambas identidades, Catalunya y España, y sus intereses quedan incluidos y trascendidos, que es lo que caracterizaría el segundo grado. Mi opinión es que por ahora (sobre eso, que yo sepa, no hay estudios en los que apoyarse ni a favor ni en contra), el soberanismo está empujando mejor el centro de gravedad hacia esmeralda. 

viernes, 18 de julio de 2014

Los argumentos unionistas desde la perspectiva integral

(Este es un primer intento de clasificación)

UNIONISMO ROJO

Los catalanes no podeis votar porque nuestra  ley no os lo permite. Vuestras razones no nos importan. Callad y someteos, si no quereis evitar males mayores

UNIONISMO AZUL/ÁMBAR:

¿¡Cómo que secesión!? Un BIEN como España que ha perdurado durante siglos no puede ser destruido por el capricho de una minoría. España no es una teta a la que uno chupe lo que pueda, España es un esfuerzo construido con la aportación de todos. Quien pretenda destruir ese esfuerzo deberá pagarlo, no se puede consentir

UNIONISMO NARANJA:

[Copio los argumentos de la patronal catalana] Catalunya es el principal mercado de España y viceversa. Ambos se necesitan y con un “choque de trenes” todo el mundo perderá. Es cierto que hay que revisar el tema fiscal, el déficit de infraestructuras y permitir que Catalunya organice su escuela como quiera. Todo se puede hablar para llegar a un acuerdo que satisfaga a todas las partes

UNIONISMO VERDE

[Copio los argumentos del nuevo partido “Podemos”] És una lástima que Catalunya se vaya, pero si esta es su libre decisión hay que respetarla

UNIONISMO AMARILLO/ESMERALDA 

[Propuesto por Alejandro Villar[1]] todos los Españoles tienen derecho a las mismas cosas, idependientemente de donde nazcan. Así que respetando la identidad intersubjetiva y algunos rasgos del gobierno catalán con características propias, hay otras muchas cosas que es más sencillo y eficiente que sean estatales...



[1] Alejandro Villar añade: Mi sesgo es por al unidad de España, y de Europa, y del mundo. Creo que sólo tiene sentido defender identidades menores si están siendo oprimidas, si no a lo que vamos es a una identidad más global o mundicéntrica